¿POR QUÉ SENTIMOS QUE NO SOMOS SUFICIENTES?
- Sandra Romero O.
- 16 ene
- 3 Min. de lectura

En mi práctica profesional, encuentro que hay una sensación común entre mis pacientes de “sentir que no son suficientes” no son suficientes en los estudios y/o en el trabajo, no se sienten suficientes para su pareja y/o para sus padres, no son suficientes para ell@s mismos, etc. ¿Te has sentido así alguna vez?
En este artículo te explico las razones por las que podrías haberte sentido así alguna vez en tu vida, o tal vez actualmente te sientas así.
Primero que nada, cabe señalar que es muy probable que hayas crecido escuchando este tipo de frases:
¡Te sacaste un 18! ¿Pero, por qué no un 20?
¡Mira a tu prima!¡ Siempre esta bien peinada y mira que delgada es!
¡Los segundos lugares no existen! ¡Sólo es válido el primer lugar!
¡Otra vez te equivocaste!
¡Porque eres tan #&#%$!
¡Nadie te va a querer con ese carácter!
Y algunas veces esas frases han sido acompañadas de insultos y violencia física, que nos hacía preguntarnos:
¿Por qué me hacen daño?
¿Por qué no me quieren?
¿Qué tengo de malo?
¿Soy tal fe@, tont@, mal@ que no puedo cumplir con lo que quieren de mí?
De esta forma nos hacían cuestionar nuestra propia existencia. Y esos sentimientos cuando no los trabajamos, nos acompañan en nuestra vida adulta. ¿Y de qué forma esos sentimientos nos pueden acompañar en nuestra vida adulta? Acá señalo sólo algunos ejemplos:
1) Por ejemplo, inconscientemente buscamos relacionarnos con personas que logran que cambiemos nuestra forma de vestir, nuestros gustos musicales, que nos alejamos de familiares y/o amigos, incluso que dejemos el trabajo, estudios, etc.; y lo hacemos felices, con tal de complacerlos.
2) En el trabajo y/o estudios, nos autoexigimos a niveles muy altos logrando vivir estresados y ansiosos casi todo el tiempo. Y muchas veces nos enfocamos en este aspecto, dejando otros aspectos de nuestra vida en menor prioridad, como a nosotros mismos, a nuestra pareja, a nuestra propia familia, amigos etc.
3) Buscamos cambiar a veces también nuestro aspecto físico tratando de agradar a otras personas con ello.
Entre otros ejemplos donde buscamos complacer, agradar y que nos reconozcan. Y en todo este proceso muy desgastante, al final nunca llegamos a sentirnos que somos suficientes. Porque en el fondo, estamos buscando que papá y/o mamá o alguien importante en nuestra vida, nos diga que sí lo somos. Y lamentablemente muchas veces esto no va a pasar, porque no podemos controlar el comportamiento del otro.
El secreto para no sentirnos así es que en realidad de adultos lo que necesitamos solamente es nuestra aceptación plena. ¡Sí, la de nosotros mismos!
Porque si nosotros nos queremos y aceptamos, siempre seremos suficientes y será más fácil dejar ir a las personas que no piensan así y que tratan de cambiarnos y/o poner límites en comportamientos que nos quitan nuestra energía.
Recuerda: lo que sea que hicieron con nosotros de chicos, no fue nuestra responsabilidad, ni nuestra culpa…pero ahora de adultos, LO QUE NOSOTROS HAGAMOS, CON LO QUE HICIERON DE NOSOTROS, ESA SI ES NUESTRA RESPONSABILIDAD
Sí sientes que te encuentras en este tipo de situaciones y te es difícil encontrar la aceptación plena de ti mism@, te recomiendo que vayas a terapia psicológica para que te ayude a poder cambiar esta situación que te desgasta y que sobre todo te cuestiona sobre ti mismo.
Commentaires